Draghi vuelve para salvar a Europa

Por María Gatón Fraile

El reputado economista ex primer ministro italiano, ex presidente del Banco Central Europeo y ex presidente del Banco Central italiano, volvió a la palestra mediática después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, en el último discurso del Estado de la Unión de septiembre pidiera a Mario Draghi un informe sobre el presente y futuro de la competitividad en Europa. Desde entonces todos los ojos han estado puestos en el político italiano. Para muchos, Draghi viene a salvar Europa.

Mario Draghi ha dado algunas pinceladas esta semana en la conferencia “Global Boardroom” de Financial Times y hemos podido recoger sus primeras impresiones.

Con respecto a la influencia de la guerra de Ucrania en la economía europea, Draghi apunta que claramente se ha visto que, la invasión de Ucrania fue preparada por Rusia de una forma premeditada con un “timing” claro cuando Europa estuviera con niveles mínimos de stock de gas natural. Fue predominantemente un shock de suministros que después se propagó a otras partes de la economía. El exprimer ministro precisó que la política monetaria que se llevó a cabo fue correcta.

Ahora la inflación está descendiendo en Estados Unidos y las razones del origen de la inflación son diferentes y se pueden atribuir predominantemente a una extraordinaria expansión de la política fiscal. Hubo una presión fiscal en los tiempos de COVID, y tras la regulación de “The Inflation Reduction Act” IRA, se vuelve a incidir en el tema fiscal. Todo recuerda a lo que ocurrió en los 70.

Con respecto a la posible recesión de Europa, Mario Draghi confirmó que” habrá recesión en Europa” especialmente en el primer trimestre del próximo año. Hay también que tener en cuenta que Europa no ha tenido jamás un nivel tan bajo de desempleo con un mercado laboral tan ajustado. Insistió que habrá recesión, pero no será desestabilizadora, matizó.

“Europa debe actuar unida tanto desde el ámbito económico como geopolítico”. Con respecto a la perspectiva económica y estructural, el mercado laboral ha actuado de forma positiva, pero parece una continuación de tendencias pasadas en comparación con Estados Unidos. La economía europea técnicamente es menos dinámica que la norteamericana. “Nuestra productividad no suele ser tan alta como la de Estados Unidos. Ante esta situación deberíamos preocuparnos por la productividad europea y hacer algo para cambiarlo”.

El ex presidente del Banco Central Europeo consideró que la economía europea pierde peso y competitividad en los últimos 20 años, no sólo con respecto a Estados Unidos sino también a Japón, Corea del Sur y por supuesto China. Matizó, que se aprecia en los diferenciales de productividad, pero también en el área tecnológica en el que Europa ha perdido “footprint”. Este tema es fundamental porque llega en un momento crucial para Europa en el que el modelo geopolítico europeo de la Segunda Guerra Mundial ha desaparecido. Era un modelo basado en el sector de la Defensa con predominio de los Estados Unidos y una energía barata que procedía de Rusia. Sin embargo, ahora la energía es mucho más cara en Europa que en Estados Unidos y China. Con respecto al sector de la defensa se debe pensar seriamente en “racionalizar el gasto de defensa”.

Europa es el segundo mayor inversor en Defensa después de Estados Unidos. Europa debe reflexionar si está siendo más Unión Europea o realmente varios pequeños países compitiendo entre ellos. Se debe mejorar la productividad y dar más valor a inversiones hi-tech. ¿Cómo se puede hacer? De momento el Sr. Draghi incidió en aprender de los Estados Unidos. Primero hay que preguntarse si Europa tiene los mismos clústeres científicos que en Estados Unidos y Gran Bretaña que cuentan con Silicon Valley, Boston, Oxford y Cambridge. Sin embargo, en Europa continental no hay nada similar. El primer tema es el capital humano, las habilidades, la educación y por supuesto otros temas como la Inteligencia Artificial, la digitalización, etc.

También en el sector de la energía debe actuar de manera unida. “No se va a ningún sitio pagando el doble o el triple que el resto del mundo”. Hay que tener en cuenta las infraestructuras de la energía. Se debe optimizar el gran poder económico de Europa en el resto del mundo y buscar otras formas de energía renovables. Recordó que no hay mucho tiempo

Respecto al Brexit el exmandatario lamentó la salida de Gran Bretaña porque la Unión Europea sin Gran Bretaña es otra Unión Europea y ambas partes pierden.

En lo que se refiere al dólar y su continuo dominio, cuando se mira a la historia de las divisas, se aprecia como esta moneda, prevaleció sobre la libra británica, coincidiendo con la subida de los Estados Unidos como un poder global. No se ve, hoy en día, ningún otro poder superior que los Estados Unidos. En este sentido explica que, si se observan los años 70, ocurrió exactamente lo mismo. Europa tuvo un liderazgo confuso, que despertó con la guerra y que se debilitó por la política Exterior, con problemas y disfunciones internas. Europa no está muy alejada de esta realidad, no se ve ningún país superior a Estados Unidos. Pero tampoco existe ningún mercado financiero que funcione mejor y esté estructurado como el norteamericano. Por tanto, se tiene poder político cuando se tienen todos los commodities en dólares y los mercados financieros más importantes son Estados Unidos, “ninguna otra moneda puede competir con el dólar”.

Sobre la crisis del capitalismo democrático, el tema central está en los valores. Vivimos en un mundo creado por Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial y hemos seguido dependiendo del liderazgo de Estados Unidos.

En el ámbito de las democracias hizo mención del incremento de los sentimientos antidemocráticos y la falta de valores. Consideró que hoy en día se ven las autocracias, las democracias liberales con países que defiende los valores religiosos, pero no se respetan los derechos humanos quebrantando los derechos civiles.

En Medio Oriente, Europa no tiene de momento ningún papel muy activo en este tema. En Europa se ha aprendido algo de los horrores que hemos vivido y “hay que ser mucho más activo en promover procesos de paz y acuerdos políticos que sean sostenibles para todo el mundo. Europa es responsable de la indiferencia pensando simplemente que dar dinero es suficiente. No es suficiente, hay que hacer mucho más”

En lo que respecta a la guerra en Ucrania recordó que Europa está en una situación geográfica muy sensible, además de estar cerca de África, del Medio Oriente y África del Norte, todas estas zonas son turbulentas. “Hay que preocuparse de la emigración y de la vulnerabilidad del mediterráneo. Europa sigue dependiendo de Estados Unidos para defenderse. Realmente para la Unión Europea es un tema de supervivencia”

Concluyó que Europa debe tener una unión más profunda, capaz de plasmarse en una política exterior y una Política Común de Defensa, además de todas las políticas monetarias y fiscales. La Unión Europea, sino profundiza en una “unión de defensa y una unión de política exterior común, no sobrevivirá, tan sólo será un mercado único”.

Este resumen nos da una idea, aunque permanecemos expectantes al esperado informe del Sr. Draghi de competitividad para conocer su visión y estrategias para mantener el alto bienestar de Europa.